Decir que los manillares de 28 tienen sus ventajas e inconvenientes:
Al se más gruesos dan una mayor precisión en la conducción a la vez que
vibra menos la dirección tanto como el manillar, lo que a su vez podría provocar
mayor cansancio en los antebrazos al ser menos flexibles.
Mayor resistencia en caso de caída debido a su mayor diámetro; recordemos
que normalmente las motos traen manillares de 22 y de hierro.
Algo muy a tener en cuenta es su altura, dependiendo de lo que pretendas conseguir:
de ser muy elevados te desplazará el cuerpo ligeramente hacia atrás y puede quedar la dirección algo más "suelta" a la hora de abordar una curva, aunque es perfecto para grandes trayectos
y uso urbano de la moto.
De ser muy plano produce el efecto contrario: carga más el peso en la rueda delantera
lo que la hace más segura para las curvas, entra ligeramente más fácil y evidentemente
muerde más en neumático influyendo en su desgaste.
Y ya dependiendo si eres muy preciso y sibarita en la conducción ya se puede entrar
en subir o bajar algo las botellas de la dirección, pero bueno,
esto lo dejaremos para otro dia...